lunes, 11 de febrero de 2013

Charly con Serú en la primera noche del Cosquín Rock

Junto a Pedro Aznar y David Lebón repasaron algunas de las canciones inoxidables del mítico grupo. También se presentaron Fito Páez y Cielo Razzo entre otros.


Apenas llegué al predio vi la vuelta al mundo y supe que quería subir al asiento de color rojo. Porque en Cosquín Rock pasa eso. Vas, tal vez con ganas de escuchar a Pedro Aznar, y cuando llegas te encontrás con algún otro atractivo complementario que traslada el apetito de ver un show. Entonces haces la cola. Tardas unos cuantos minutos en llegar a destino. Te ponen todas las guardias de seguridad necesarias, y arranca. Pero, puede que intervenido por algunas cuestiones de superstición, no te toque el color de asiento necesario.  A mí en la primera vuelta me tocó el Verde.  Y quería el Rojo
De todos modos, si algo tiene de  estratégico la vuelta al mundo que hay en el de Cosquín Rock, es la posición en donde está. Si uno se atreve a abordarla, tendrá la oportunidad de apreciar todo el festival, y muchísima de la escenografía natural desde las alturas.
El tema, también, es ir temprano. Con tiempo y paciencia desde allí se pude apreciar absolutamente todo. El hangar entero con heavy metal todo el día. Los patios cerveceros, el ingreso paulatino por momentos, y efervescentes por otro. Las carpas temáticas. El toro salvaje. Las promotoras de todo lo que se te ocurra que hay en la provincia de Córdoba. También se ven las columnas que llevan escrito los horarios de la grilla. Por ejemplo, observé perfectamente mientras escuchaba a David Lebón  justo en el momento que hace “Esperando Nacer”, como un padre sacaba a su hijo del cochecito y lo abrazaba bien fuerte.  Mientras la rueda toma respiro a dieciocho metros de altura, se escucha a David decirle al público “estaba pensando que me podría dedicar a esto. Le doy gracias a Dios por haberme hecho no trabajar” y algunas cosas más que no recuerdo bien porque justo empezó otra vez a girar y tuve que bajar. Hice la cola nuevamente, y lamentablemente agarré el asiento amarillo. Esta vez presté atención al escenario temático. Escuché a ‘Que acelga’ trío punkies arañando lo primitivo que desborda de pasión por lo que hacen. Justo allí, cuando estaba a punto de cambiar de opinión, veo a los músicos de Cielo Razzo salir de atrás del mismo escenario que queda a unos cuatrocientos metros del principal. Iban todos juntos a ver el show de Pedro Aznar. El público lanza el primer OLE OLE del día, cuando termina ‘Mientes’.
Cuando voy por la mitad de la cuarta vuelta arranca Fito Páez. Tal vez, lo mejor del día. Se nota que ‘El amor después de amor’ es un disco eterno. Apenas suena “Trafico por Katmandú” se podían observar miradas cómplices, de un constado al otro del predio, que con un guiño dan el ok a instantes que dominan el inconsciente colectivo de miles de personas. Y también hay dos pibes, que en la parte de “mi vieja nunca nunca los escuchó” se callan y se ponen a llorar.
 Antes de hacer otra vez la cola, giro hacia el escenario temático y escucho que el público canta apasionadamente las últimas canciones del show de Cielo Razzo.  Mientras, en el principal,  empezó Andrés Ciro. Pero me quedo con el otro, porque Edelmiro Molinari toca de invitado con El Bordo. 
La vuelta al mundo deja de funcionar en el momento que Charly García hace delirar a 40.000 personas en el predio del aeródromo de Santa María de Punilla con “Demoliendo Hoteles”. Y luego vienen canciones fantásticas. “Yendo de la cama al living”, “Anhedonia”,  “Ojos de Video tape” y “Eiti leda” entre muchos. Esto nos recuerda a todos que Pedro y David tal vez están todavía en camarines y esperamos una juntada de los tres Serú.  Charly recuerda la falta de Oscar Moro y se unen en el escenario de Cosquín Rock. Pienso en el asientito rojo de la vuelta al mundo que nunca alcancé mientras “Perro andaluz” me dicta “Soy un tonto en seguirte”. Después “Seminare”  y algo más de Charly sólo, pero ya estaba. La emoción superó todos los análisis musicales posibles en la primera noche de Cosquín Rock 2013.

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